Según los expertos, una carencia de nutrientes en la tercera edad, puede provocar los mismo síntomas que una demencia senil.
La salud de los mayores en gran parte está condicionada por su alimentación y de ahí que gran parte de las enfermedades que acontecen en estas edades vengas dispuestas por un mal aporte de nutrientes. En mayor parte se trata de enfermedades degenerativas.Esto se debe a la carencia de la vitamina B12, una vitamina que se encarga de la formación de glóbulos rojos sanguíneos y del mantenimiento del Sistema Nervioso Central.
Esta vitamina la podemos encontrar en huevos, carne de res, leche, vísceras, carne de aves y mariscos.
Cuando se nos presenta un cuadro clínico semejante o igual al de una demencia, debemos pensar dos cosas:
que se trate posiblemente de una degeneración neuronal o que se trate de una carencia de esta vitamina.
Por lo tanto debemos ofrecer a nuestros mayores una dieta rica en esta vitamina para evitar caer en lo que pueda parecer una Demencia Senil.
